El 9 de abril de 1958, en el territorio de la actual provincia de Villa Clara acaecieron diversas acciones en apoyo a la Huelga General convocada por la dirección del Movimiento Revolucionario. Numerosos combatientes cayeron en enfrentamientos con el enemigo o asesinados, luego de ser capturados al concluir las operaciones.
En algunos lugares del territorio la huelga adquirió notable fuerza, entre ellos se destaca Sagua la Grande. En esta ciudad a partir de las 11 de la mañana de ese día comenzaron actuar varios grupos en distintos puntos estratégicos. Fueron atacadas las plantas móviles de la compañía de electricidad; dependencias de los talleres ferroviarios fueron quemados, una locomotora volcada y un coche-motor inutilizado, dominaron los lugares altos de la ciudad y obligaron a las fuerzas del régimen a replegarse en los cuarteles. El pueblo cooperó al lanzar objetos a las calles, albergar y alentar a los combatientes. Muchos jóvenes se unieron a los que luchaban, con desventaja en número y armamentos para hacer efectiva la huelga.
Veinticuatro horas duró la resistencia de los sagüeros. El día 10, ante la imposibilidad de sostener el paro por más tiempo, los revolucionarios salieron de la ciudad hacia el campo y, perseguidos por la aviación y la infantería alcanzaron la zona de Monte Lucas. Allí, atacados y sin posibilidades de defensa cayó un numeroso grupo de jóvenes revolucionarios, otros lograron evadir las fuerzas represivas.
En otros lugares de la provincia fue apoyada la huelga, como en Remedios donde se intentó fortalecer un pequeño grupo de hombres que estaban ocultos en la zona. En esta operación que fue delatada, cayeron dos hermanos que avituallaban a los alzados. Además, fue asesinado un obrero asesinado participante en el paro. También fue muerto por la fuerza pública un joven campesino que realizó acciones en le transcurso de la huelga, en áreas rurales de Encrucijada.
En otras poblaciones fueron regadas puntillas, cerrados comercios, interrumpido el tráfico, afectado el fluido eléctrico como apoyo a la paralización del territorio.
El 9 de abril los villaclareños escribieron una página llena de heroísmo y abnegación. La sangre de 60 de sus habitantes caídos en combate o asesinados, fue contribución de la población en aquel intento por efectuar un movimiento capaz de derribar al tirano. Sin embargo ese día el 9 de abril el pueblo sagüero escribió una de las más heroicas páginas de la guerra por nuestra definitiva liberación.
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